LO QUE NO SE DICE ACERCA DEL POSTPARTO


Después de toda la sacudida física y mental de tener a tu bebé, te esperan las noches sin dormir, la angustia de lo desconocido, la incertidumbre que te inunda por saber si estás haciendo las cosas correctamente.

Además de mantener la prudencia al momento de todos los comentarios inoportunos de familiares y amigos que te invaden de consejos expertos sobre cómo ser una buena madre y lo que debes o no debes de hacer. Estos comentarios pueden lograr que estallen las emociones mezcladas de enojo, tristeza profunda y sin causa alguna, ansiedad, angustia e inseguridad. Basta con un pequeño y ligero movimiento para explotar y convertirte en la peor del mundo.

Insensible, loca, inmadura. Bueno, podríamos seguir con la lista pero estos adjetivos son suficientes para lucir como una mujer que definitivamente no eres tu en su normalidad. 

No sabes cómo controlarlo. La tristeza es como si fuera una parte de ti que es imposible desprenderla. Entonces te encierras en el clásico “¿qué hago?”. De pronto no tienes planes y si los tuviste se caen y decides que no son tan buenos como para continuar con esas metas planteadas. La inseguridad te rodea en todo.

Es ahí donde te detienes y dices “basta” ¿qué más puedo hacer? Te miras al espejo y sencillamente te ves en una imagen que desconoces y no te gusta.

Así que decides aislarte y ocuparte de lo que tienes que, es decir, tu bebé. Te preguntas constantemente y ¿cómo lo hacía mi mamá, mi abuela con tantos hijos? Fácil la sumisión es igual a evadir.  Enfocarte en tu bebé sí, pero a través de verte a ti:

Sigue estos brillantes consejos:

  • Tu bebe nunca va a estar bien si tú no lo estás. Recuérdalo siempre y busca ayuda de tu pareja, de tus familiares más cercanos, de tus amigas, incluso si lo necesitas, de ayuda profesional. 
  • Escucha música clásica. Te ayudará a ti y a tu bebé. Calma la ansiedad incluso te puede provocar alegría; además incita a la fantasía, a la creatividad lo cual te transporta a otros escenarios para salir de ese cuadro depresivo y a tu bebé lo tranquilizará.
  • Planea tus actividades diarias. La rutina nos ordena, y es en este nuevo momento de nuestras vidas, en que necesitamos tener un orden y rutinas que te ayuden a tí y a tu bebé, a tener días armoniosos.
  • Destina 30 minutos para un tratamiento spa casero. Cepilla tus piernas y glúteos así como la parte abdominal suavemente con la finalidad de fomentar la circulación y eliminar las impurezas. Realiza pequeños movimientos circulatorios y añade el alcohol de la Tía Verde para disminuir las estrías

Tips supremos: Recuerda utilizar productos naturales como el cepillo de cerdas naturales de ixtle de La Tía Verde 

  • Maquíllate y vístete como si fueras a salir. El solo hecho de mirarte al espejo y colocarte el maquillaje te cambia hacia otra perspectiva. ¡No lo dudes!
  • Consume alimentos que te animen: Chocolate para elevar todos tus sentidos y sobretodo la serotonina. Además puedes incluir yogur, nueces, almendras que te aportarán energía y mejorarán tu ánimo.

Disfruta cada etapa de y con tu bebé y transmítele toda tu energía y alegría

El sol no es el único que brilla. No te olvides de tu propio brillo y de trasmitírselo a tu bebé!