Dormir bien es importantísimo, no sólo para dejar descansar nuestro cuerpo, si no también porque lo podamos regenerar.
Cuando nuestro cuerpo descansa elimina toxinas y se limpia, lo que hace que nuestros órganos trabajen de una manera más eficiente.
Cuando dormimos, también controlamos nuestras hormonas que son las encargadas de regular la grasa en nuestro cuerpo, por lo que es básico tenerlas controladas. Lo recomendado es dormir entre 7 y 8 horas diarias.
También, es fundamental dormir en una posición correcta, ya que así, favorecemos nuestra circulación sanguínea, no retenemos líquidos y no permitimos que se drene la grasa entre las capas de nuestra piel.
Así que, no olviden acostarse todo los días listas para descansar y renovarse. Para lograrlo solo deben tener una alimentación balanceada, hacer ejercicio y aprender a respirar correctamente durante el día para relajar su cuerpo. Verán que valdrá la pena tener un sueño profundo.